Cómo sumamos y restamos
28 de octubre de 2014
Este post, que puede parecer muy obvio, es para explicar a las familias cómo estamos aprendiendo a sumar y a restar en clase, para que en casa podáis conocer nuestro método y así ayudarles de la misma manera.
Sumamos
Hasta ahora he estado observando a los niños mientras hacíamos sumas sencillas y TODOS sabían sumar, por lo que les he dejado ir haciendo solitos. El caso es que empiezo a ver niños que "se hacen un nudo" con los dedos y hasta se ayudan con la nariz. Y es que, mientras el resultado de la suma es menor que 10, todo perfecto (¡me bastan los dedos!). Pero ¿y cuándo no tengo dedos suficientes? ¿Sigo con los dedos de los pies? Pues no, jeje. Los hay que se defienden solitos (y me encanta que encuentren sus propias estrategias), los hay que tienen mayor capacidad de abstracción y pueden hacer algunos cálculos mentalmente, pero también hay muchos que no les viene nada mal que les demos una ayudita para coger un sistema que les vaya bien. Así que hemos empezado a hacer sumas en grupo en voz alta, usando todos el mismo sistema.
Vamos a poner un ejemplo: 8 + 4 = ?
1º: ponemos el número mayor (el 8) en la cabeza.
2º: ponemos el número menor (el 4) en los dedos.
3º: contamos (desde el número de la cabeza) el número de dedos que tenemos, mientras los vamos retirando hasta quedarnos sin dedos: 9, 10, 11 y 12.
El resultado de la suma 8 + 4 es igual a 12. Y sólo con los dedos nos hubiera resultado imposible, porque no tenemos 12 dedos :-) También nos podemos ayudar de dibujos, contar bolitas, etc. TODO VALE. Pero llegará un momento en que necesitaremos ser más rápidos, por lo que yo les voy enseñando a hacerlo así en grupo, todos juntos, para que se vayan familiarizando y habituando, mientras respeto cualquier otro sistema de forma individual.
Toni nos va a ayudar a hacer otra suma de esta manera.
2 + 9 = ?
¡2 + 9 = 11!
Sencillo, ¿verdad?
Restamos
¿Y qué pasa con las restas? Uy, ahí veo que andan bastante más perdidos. Por ahora, como usamos números menores que 10, no es problema, vamos quitando dedos (pero aún así, se lían bastante). Y es que es la forma natural de hacerlo y el primer paso. Además, es más fácil entenderlo, ya que restar = quitar. Por tanto, si tengo 8 - 3, pues pongo 8 dedos, quito 3 y cuento cuántos me quedan. La mayoría lo hacen así y está bien. También nos ayudamos de dibujos, y tachamos los que restamos.
Pero volvemos a lo mismo. Este sistema no es práctico a la larga, y lo peor, lo van a tener que cambiar sí o sí cuando lleguemos a las restas llevando (porque a 3 no le puedo quitar 7, y tendré que contar de 7 a 13). Por tanto, lo que yo aconsejo es, una vez entendido el mecanismo de la resta, cuando ya saben hacerlo de esta primera forma y vemos que lo tienen claro, pasar al sistema que les servirá para el resto de su vida. Será el momento de hacer muchas restas y coger agilidad.
En clase ya hemos empezado, también de forma grupal. Luego, individualmente, ya digo que cada niño lo hace como quiere.
La clave: ¿CUÁNTO FALTA PARA LLEGAR DEL NÚMERO MENOR AL MAYOR? El "para llegar" lo tienen que grabar en su mente.
Vamos a poner un ejemplo: 6 - 4 = ?
1º: Nos preguntamos ¿del 4 para llegar al 6?
2º: Cerramos el puño y empezamos a contar mientras sacamos dedos. A partir del 4...
3º: 5 y 6. Hemos sacado 2 dedos.
El resultado de la resta 6 - 4 es igual a 2. Al principio les cuesta un poco más que quitando dedos, pero ya os digo que será inevitable acabar así, por lo que pienso que cuanto antes mejor. Incluso con restas bastante sencillas, como 12 - 4, resulta necesario, puesto que, una vez más, no tenemos 12 dedos para quitarle 4. Y con esta nueva forma, ya pueden resolver esta resta.
Adrián nos ayuda a hacer otra resta de esta manera.
8 - 3 = ?
¡8 - 3 = 5!
¿A que no ha sido tan difícil?
Con el tiempo tendremos que ser capaces de hacerlo todo sin dedos. Pero eso será cuando hayamos hecho muuuuuuuchas sumas y restas y nos hayamos aprendido todas las combinaciones. Una buena forma de hacerlo, sin agobios, es ir practicando las tablas de sumas y de restas (sí, existen, no sólo hay tablas de multiplicar). Es una excelente forma de ejercitar la memoria y el cálculo mental. No hay más que tener paciencia e ir practicando tabla por tabla. ¡Y nunca pasar a otra tabla hasta que la anterior se domine! Empezamos con "+1": 1+1, 2+1, 3+1, 4+1, 5+1... Esta tabla es muy fácil porque se trata de decir el número siguiente. Luego seguimos con "+2": 1+2, 2+2, 3+2, 4+2, 5+2... También resulta bastante fácil porque es saltarse uno. Y así con todos los números. Es buena idea imprimirse unas tarjetitas con las diferentes tablas. Y pedirle a los niños que se las aprendan. Luego jugar con ellos. Primero por orden, luego desordenadas... ¡Lo importante es entrenar!
Aquí os dejo unas tablas de sumas y restas, aunque las podéis hacer vosotros mismos en unas cartulinas, para que duren más.
En la tabla de restas, para que sea más fácil, podrían estudiar sólo hasta el 9, porque cuando hagan restas en columnas, sólo van a manejar cifras del 0 al 9. Así que si se saben eso, ¡ya está fenomenal! Y así, cada nueva tabla, se acorta un poquito. ¡Más motivados estarán para aprender una nueva tabla! Cada vez más cortas. ¡La del 9 está chupada!
¡A practicar!
Me ha servido mucho. Gracias!
ResponderEliminarMuchas. Gracias. Los padres necesitamos entender cómo explicar a nuestros hijos. Muy bueno la verdad me ha servido de gran ayuda.
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